Universidad de Jóvenes Emprendedores y Creativos

Uno de los grandes problemas en el aula es la comunicación entre alumnos y profesores a la hora de impartir las clases de la forma más didáctica y efectiva posible, para que los alumnos puedan absorber el contenido y aprender materias nuevas e interesantes para su futuro.

Para tratar de solucionar esta barrera existente, el gigante Google ha creado una aplicación que cambiará los flujos de información en las clases: Google Classroom.

Se trata de una herramienta para docentes que comenzó su andadura en agosto de 2014. Tras numerosas pruebas en distintos centros educativos, es considerada una de las más eficientes para que el profesor pueda organizar sus clases, el temario a impartir, los deberes diarios de los alumnos y su comunicación con ellos.

En definitiva, Google Classroom se ha creado para simplificar la carga laboral y horaria de los profesores y la comunicación con los alumnos. Se encuentra dentro de Google Apps, al igual que las conocidas Gmail, Google Drive y Google Docs.

Los beneficios de Google Classroom

El abanico de posibilidades que ofrece Google Classroom es muy amplio. La herramienta crea un aula virtual donde los alumnos y profesores pueden saber todo lo que ocurre en el día a día de la clase, estén presentes o no.

Todo en un mismo lugar

En lugar de simplemente mandar deberes a los alumnos, e indicarles qué tareas deben realizar, con riesgo de que se les olvide o no lo apunten, Google Classroom permite a los docentes crear tareas, agregar documentos (ejercicios a realizar o lecturas recomendadas), enlaces y vídeos.

De esta manera, los alumnos tienen toda la información en un mismo lugar y saben qué deberes tienen pendientes. El profesor, de un solo vistazo a la aplicación, puede saber cuáles alumnos han realizado las tareas asignadas y cuáles no.

¡Se acabó la costumbre de copiar!

Los documentos y tareas de la clase se dividen por alumnos dentro de la herramienta, por lo que se elimina parte del riesgo de que copien el trabajo de sus compañeros, mientras están en clase realizando los ejercicios.

Menos papeleo

Sin duda, ¡el futuro ha llegado! ¿Sabes que con la App de Google Classroom los estudiantes pueden escanear sus trabajos y ejercicios y subirlos a la herramienta? De esta manera, quedan registrados y el profesor puede revisarlos.

Si en un centro utilizan Google Classroom, se acabaron las mochilas llenas de papeles y los pupitres con cientos de fotocopias. Una herramienta educativa imprescindible en el siglo XXI.

Compartir los conocimientos

Tanto los profesores como los alumnos pueden compartir notas, información y otros documentos, además de noticias o anunciar exámenes o excursiones. Al hacerlo, cuando los alumnos se conectan, crean una especie de foro que permite que la comunicación fluya constantemente.

Ahorro de tiempo

No es necesario que todo el centro educativo se entere de lo que pasa en una clase. El profesor puede crear un código único para su clase, e invitar a los alumnos para que sólo ellos vean sus ejercicios, temarios y notas.

La organización del trabajo con Google Classroom es muy eficiente.

Seguridad ante todo

Al igual que el resto de las aplicaciones de Google para servicios relacionados con la educación, Google Classroom no tiene publicidad, y nunca utiliza el contenido o la información de los estudiantes para fines publicitarios.

Además, es una aplicación gratuita para los colegios, y los alumnos no necesitan estar conectados a internet para acceder a sus deberes.

Empezar a usar la aplicación paso a paso

1. Debes tener una cuenta de educación en Google. Puedes darte de alta aquí.
2. Aunque se puede usar desde el ordenador, no te olvides de descargar la APP en tu móvil o Tablet. Si tienes Android, descárgala aquí. Si tienes IOS, en este enlace.
3. Si necesitas más información o ayuda, no te olvides de acudir al Centro de Soporte de Google.

Cómo aprender a usar Google Classroom

Existen vídeos y tutoriales para aprender de una manera práctica cómo se usa Google Classroom. Aquí tienes los básicos:

Fuente: emagister.